sábado, 21 de febrero de 2009

nostalgia


Las recorro una por una. Colección del pasado. Conmovedor. Exasperante. Módico.
Comparecen padres, abuelos, hermano. Amigos que murieron leales.
Otros que traicionaron en vida. Amores y desamores, pero sobre todo un largo y
definitivo amor. Gobernantes y gobernados. Aparecidos y desaparecidos.
Rostros de la tortura. Ojos de los verdugos. Horribles. Presencia de ausentes.
Muros con exigencias, con denuncias; otros con homenajes. Árboles y más árboles.
Y el mar, bendito mar. Barcos que no volvieron. ¿Seguiran con su escolta de delfines?
Nostalgia de un ensueño. Planicie del rotundo despertar. Y el mar, el mar de nuevo.
Con nubes que lo techan. Y gaviotas, las mías, las que saben mi nombre,
por supuesto es mentira, pero ¿no sería maravilloso que sus alas tan lisas colaran para mí?
Fotos de un palacete junto a un pobre tugurio. La reina de belleza abrazando a un mendigo.
Y el mar. Ahora mismo confirmo, juro, asumo ante el espejo, que agregaré más fotos con el mar,
este mar mío.

... y que ahora también es tuyo.
(Mario Benedetti)

2 comentarios:

Pilar dijo...

El mar, siempre el mar, que nos trae y se nos lleva,siempre presente,tan cercano y tan lejano a la vez...como sus olas...
Que relación tan bonita que tienes con el, es fantastico tu texto, tiene fuerza...

Felicidades por tu cumple que ya fué,me lo apunto!
Que los años no te cambien

mil besos azules, como el mar...

Jordi Vargas dijo...

Excelente encuadre Peter, preciosa postal.
Un abrazo